Una de las opciones que tienen las comunidades de propietarios en Zaragoza a la hora de conseguir ingresos que permitan el mejor mantenimiento del edificio es la de alquilar el piso de portería. A diferencia de la venta, los trámites son bastante más sencillos y de este modo además, se mantiene la propiedad del inmueble hasta que se decida qué se hace con ello. A continuación vamos a tratar los trámites que debe hacer una comunidad de propietarios que esté interesada en alquilar un piso de portería que esté desocupado.

Lo primero de todo, hay que tener en cuenta que si el edificio tiene un piso de portería, éste deberá estar desocupado y en un estado aceptable. No es buena idea ofrecer un piso que necesite reformas o que esté ligado legalmente a algún otro uso (aunque pueda no haber portería, si en junta se decidió que su uso era otro, por ejemplo, el de almacén se deberá de tener en cuenta antes de comenzar a ofrecerlo). Si esta vivienda necesita reformas o tiene algún elemento que deba de arreglarse, esto debe de realizarse antes de comenzar a comercializarlo.

Después de tener la vivienda ya a punto, hay que incluir en una reunión de comunidad la decisión de ofrecer el piso de portería en alquiler. Esta decisión debe tomarse por al menos las 3/5 partes de los vecinos de la comunidad (Artículo 17.3 de la Ley de Propiedad Horizontal), por lo que si los asistentes a la reunión no alcanzan a ser estos tres quintos del total de propietarios, habrá que recoger la aprobación de los restantes propietarios que no asistieron a la junta de vecinos, hasta llegar a este total de los 3/5.
Vamos a dejarlo más claro todavía, no es suficiente con que voten la mayoría o el total de vecinos que asistan a la junta, si estos no representan al menos los tres quintos del total de enteros del edificio.

Este punto es importante, puesto que si la decisión no ha sido tomada por el número suficiente de vecinos, podemos encontrarnos con que un vecino que se oponga pueda impugnar este alquiler, con los perjuicios económicos que puede generar a todos los intervinientes.
En esta decisión, también es buena idea crear un grupo de trabajo o una junta de gobierno específica que tome las decisiones posteriores que se deberán de tomar a la hora de fijar precio o elegir inquilino. Si no se crea este grupo, es posible que las decisiones se paralicen innecesariamente y eso también perjudicaría el futuro alquiler del piso. Si se toma alguna decisión por adelantado (por ejemplo, qué requisitos le van a pedir a la persona que alquile, o si existe algún tipo de criterio que deba seguirse, por ejemplo, prioridad a familiares de los actuales propietarios), también es recomendable tomar la decisión en esta misma junta.

Una vez que el piso está preparado, la decisión correctamente tomada y los vecinos esperando al posible inquilino, habrá que comenzar a ofertar el piso. Desde Fincas Torrenueva recomendamos que este tipo de alquileres, además de los requisitos económicos, se realice un análisis de solvencia mediante la contratación de un seguro de impagos de alquiler, siendo también recomendable que la gestión de la comercialización la realice una agencia inmobiliaria.

Una vez alquilado el piso, habrá que tenerse en cuenta que dichas rentas deben reflejarse en la renta de cada uno de los propietarios, necesitando que el Administrador de Fincas realice anualmente el modelo 184, teniendo en cuenta el porcentaje de participación de cada propietario e imputándole las rentas que le correspondan, para que de ese modo cada propietario pueda declararlo en su renta.

Si están interesados en alquilar su piso de portería en Zaragoza, desde Fincas Torrenueva podemos ayudarles con las gestiones previas y las de comercialización, para lo cual pueden usar nuestro formulario de contacto para consultar cualquier duda que puedan tener o solicitarnos información sobre los trámites en su caso concreto.