Basilio Boggiero: Calles del Casco Histórico de Zaragoza
15 septiembre 2010

 

La calle Basilio Boggiero (o como se le suele llamar la “Calle Boggiero”) es una de las calles más extensas del Casco Histórico. Comienza en la Avenida Cesar Augusto, a los pies de la Iglesia de Santo Tomás de Aquino, junto a Escuelas Pías, para terminar en el Paseo Maria Agustín, junto la Plaza Europa. Está dedicada a Basilio Boggiero Spotorno, un sacerdote italiano que fue enviado a Zaragoza para estudiar y que finalmente se vio envuelto en los Sitios de Zaragoza, donde apoyó a Palafox.

Esta calle, por su gran logitud, tiene tramos de muy diferentes tipos, por lo que se puede pensar que la calle se divide en varios tramos muy diferenciados, por lo que habrá gente que tan solo conozca una o dos zonas de la misma. Vamos a por ello:

 

Si por algo es conocida la calle, es por albergar en ella a la Sala Oasis, una Sala de Conciertos y Discoteca, quizás de las que más solera tiene en la ciudad, junto con el reabierto “El Plata”. Su decoración hace referencia a los espectáculos de Cabaret y su interior decorado en madera ha tenido un gran número conciertos tanto de artistas nacionales como extranjeros. La situación de la Sala Oasis se encuentra al inicio de la calle, en la Plaza del Padre Pedro, que ha sido recientemente restaurada y decorada con motivos relacionados con la música. Los primeros números de la calle han sido costruidos recientemente, y según nos adentramos en la calle podemos comprobar como los edificios comienzan a ser de mayor antigüedad.

En este segundo tramo de la calle (a partir del número treinta y tres en adelante) nos encontramos con multitud de edificios que el Ayuntamiento de Zaragoza ha considerado que deben ser catalogados por tener interés histórico, arquitectónico o cultural (Enlace a las fichas en la web del Ayuntamiento de Zaragoza). Es en esta zona donde más contrastes se pueden encontrar, y junto a edificios de reciente construcción podemos encontrar edificios que necesitan una rehabilitación completa. Es posible que en el cruce de esta calle con la Calle Cerezo esta situación sea más palpable.

Según nos acercamos a un nuevo cruce de calles -esta vez con la C/ Mayoral- todas estas dudas se despejan y tras un pequeño tramo de calle en subida llegamos a un nuevo cruce con la Calle Santa Inés, donde se ubica el Colegio La Anunciata, y otra serie de comercios cercanos a la plaza del Portillo. A partir de aquí, la calle parece haberse renovado en mayor medida, aunque eso suponga perder gran parte de su encanto como calle del Casco Histórico. Es en este tramo final donde pasamos de una calle peatonal a una con tráfico rodado y de mayor anchura. Muchos de nosotros no reconoceríamos que esta calle es la misma que hemos comenzado a andar cuando comenzamos en la Avenida Cesar Augusto.