Aunque legalmente está permitido, la subrogación de hipoteca cambiando al deudor (es posible también cambiar de banco, pero no es el tema a tratar en este artículo) necesita que la entidad bancaria autorice en cierto modo la subrogación del deudor.

La venta de un piso con Hipoteca suele suponer que el vendedor cancele su deuda pendiente y el comprador contrate una nueva hipoteca, pero en algunos casos es posible que al comprador le pueda interesar la subrogación en lugar del vendedor, puesto que puede darse la situación de que las condiciones de crédito que se ofrecen en ese momento son peores de las que contrató en su momento el vendedor. De todos modos, esto tiene una serie de limitaciones:

-Que la entidad bancaria lo permitiera en el préstamo inicial que se concedió, y
-Que el comprador que pretende subrogarse cumpla los mínimos de solvencia que se exige para la concesión de dicho crédito.

Esta opción, que es muy minoritaria (hay que tener en cuenta que el comprador debe de aportar el dinero hasta el total del precio) tuvo cierto uso tras la explosión de la burbuja inmobiliaria, puesto que había personas que vendían los pisos por la misma cantidad que debían al banco. A día de hoy hay muy pocos bancos que permiten esta opción, que en principio es posible, pero en la práctica es casi inexistente, porque lo que se suele hacer es cancelar la hipoteca previa y contratar una nueva.